sábado, 2 de marzo de 2013

Ser mujer y nuestro código...



Ser mujer y nuestro código

Se acerca el 8 de Marzo, día Internacional de la Mujer, un día que amerita muchas celebraciones, foros, encuentros, decisiones y en el que cada vez las mujeres despertamos del letargo histórico, de la lucha, del “reclamar” espacios, ser escuchadas, tomadas en cuenta, valoradas,  trato digno en nuestras casas o trabajos, situaciones que  por derecho natural como seres humanos nos corresponde.

Creo que hoy por hoy la mujer está viviendo una etapa histórica y decisiva en varios aspectos, pero lo que observo y vivo es que somos participativas, propositivas pero siempre conservando la esencia de mujer, ese “halo” por el que Dios nos creó. Y no quiero escribir hoy acerca de la divinidad que nos fué conferida como privilegio que es el hecho de que todos hombres y mujeres tenemos un aspecto femenino, pues en nuestra gestación estuvimos “dentro” de una mujer, dependientes de ella para poder formarnos ó que en su mayoría fuimos protegidos y cuidados por mujeres. Se me hace maravilloso esa fortaleza de tener la responsabilidad de que a través de nuestra capacidad natural de procrear y proteger la vida continúe.

Soy de las que disfruto ser mujer, soy de las que he también he recibido “privilegios” por ser mujer, de las que también he recibido rechazos por mi condición de fémina; pero soy de las que creo que las mujeres “hacemos” la diferencia. Sólo que hay algunos temas que tenemos que  fortalecer para poder potencializar los recursos que TODAS tenemos.  Y uno importante es la autoestima,  el como te ves a ti misma, de ahí partimos, pretendemos que OTROS  nos vean como nos gusta y a nosotros mismas no nos gustamos, quiero decirte que proyectas como te sientes, es por ello que debemos ACEPTARNOS nosotras mismas, así como somos, con el cuerpo que tenemos, con nuestra mirada o el tipo de pelo que nos tocó. Aceptarse y amarse como eres es un proceso, a mi costó quizás muchos años, hasta que descubrí que soy y seré producto de mi misma creación y de las decisiones que por mi tomo y que nadie me obliga a nada, que soy selectiva con lo que entra a mi cuerpo, a mi mente  y a mi vida, que merezco todo y lo mejor de todo porque estoy comprometida conmigo mismas antes de con nadie más. Y vivo así, nadie puede dar lo que no tiene. Las victimas y las mártires ya no están de moda.
Sí, hay que seguir luchando por tener una mejor legislación que nos proteja, trabajar por que nuestros empleos sean mejor pagados, porque se nos respete y se nos valore y no se nos estigmatice sólo por el género.

Mujer del Siglo 21 hoy los valores, las virtudes y los consejos de las abuelas están vigentes, pero tienes que prepararte para de manera integral participar en esta sociedad competitiva. Las mujeres tenemos que afianzar ese código de ética  entre nosotras que nos “oblige” a respetarnos  y ser solidarias entre nosotras. Es muy triste darse cuenta que muchos de nuestros dolores y frustraciones son causados por OTRA mujer, que por EGO nos lastima ó por INMADUREZ actúa. Y me ha pasado en lo personal y en lo profesional. No podemos inmolarnos a nosotras mismas, denostarnos, desgastarnos todo va en detrimento a nosotras mismas y las  que vienen.

Sólo con una actitud amor y confianza entre madres e hijas,  de respeto y de condescendencia entre compañeras, de aceptación y comprensión entre amigas, de voluntad y trabajo profesionales podremos descubrir que TODAS somos iguales. Mujeres maravillosas, inteligentes, bellas, compasivas, fuertes, humanas, sensibles, intuitivas, caprichosas, soñadoras, irreverentes pero siempre amorosas hacia la vida, porque con nosotras la VIDA continúa. Seguiremos siendo protagonistas de ella, principales actrices y dadoras de vida. Vaya desde aquí mi reconocimiento a mi linaje femenino, a mis ancestras que GRACIAS a ellas y a su asentir a la vida estoy aquí para hacer algo grande con mi vida y las mujeres de mi vida: Mi madre, mis hijas, mis hermanas, mis amigas, mis comadres, mis compañeras, mis correligionarias, mis jefas, mis colaboradoras, mis líderes, mis admiradas mujeres les deseo dicha total permanente y un destino tan FELIZ  como el que eres capaz de dar y de tomar. Feliz 8 de Marzo que comienza HOY en el momento que decidas que TU ERES LA MUJER DE TU VIDA!!!!
Con mi compromiso a respetar NUESTRO CODIGO

Blanca Islas
@BlancaIslasM
@saviadevida
http://saviadevida.blogspot.mx


Equilibrio personal y espiritual

Fué una semana de muchas VISITAS  es decir emociones que vinieron a mi y que cada una en su momento con su función específica de venirme a enseñar algo. El estar atenta a lo que siento y a lo que quiero y sobre todo a lo que no quiero o no me gusta. Así que me puse a practicar dos actividades que disfruto plenamente.

El equilibrio lo logro yo misma, con mis pensamientos, decisiones pero también con mis prácticas. Prácticas que me ayudan a reconocerme a mi mismas y puede ser desde LEER  que es una de las actividades que mas disfruto y aunque ya tengo "vista cansada" creo que la leer no me cansa, por mucho tiempo me "rehuse" a usar mis maravillosos lentes, pero tuve que vencer a mi amiga la "vanidad" y con ello vino mucho mas deleite y placer al leer. Creo que si es importante lucir bonita, pero es mas importante PENSAR y APRENDER. Y una de las cosas que me alegra mucho es vivir en la ERA DE LA INFORMACION en donde prácticamente todo esta al alcance de un click. Leer me conecta con lo externo, me involucra en historias, me hace amiga de grandes escritores que han puesto todo su talento para contarme con el DON de la palabra escrita. Leer me equilibra mucho y me pone en la sintonía de lo que a mi mente entra. Me conecto hacia afuera al leer, con el exterior.

Otra actividad que también me conecta pero con algo mucho mas profundo y conmigo misma es LA MEDITACION en silencio, meditar me conecta de manera contraria al leer, meditar me conecta primero hacia mi misma, respirar y estar solo atenta a ello me hace sentir la grandeza de algo superior, poco a poco ir controlando los pensamientos, dándole un "apapacho" primero a mi mente al dejarla en blanco, eso restaura, pero de manera consiente, progresivamente, cada día un paso a la vez.  Y sé que esta práctica me acerca cada vez más a sentir la presencia del Creador, es una paz verdadera, el sentirte a ti mismo de esta manera y que estamos bajo un cuidado mayor, eso me permite trabajar en mi humildad.